La imagen, en todas y cada una de sus acepciones, es parte fundamental para poder entender el mundo en el que nos rodea. Individuo, sociedad y cultura se empapan de los conceptos de ésta, constituyendo algo esencial tanto para el pasado siglo XX como en el que vivimos, el XXI.
En todo lo anterior tiene cabida el cine como expresión cultural, social y personal. Sí, también como entretenimiento, distracción y evasión (¿quién no ha soltado una lagrimilla en alguna peli o se ha enfurecido con el malo o ha querido ser el protagonista de un mundo fantástico?).
Pero el cine es más que las películas que nos promocionan hasta el agotamiento o aquellas que consultamos en la cartelera, que también. Hoy, además, son los cortometrajes, los documentales, el videoarte, las series en televisión, los anuncios, el cine invisible, el video en los museos...
Así, desde esta pequeña atalaya pretendemos entender y descubrir este mundo desde la cotidianeidad de este espacio, recurriendo a la reflexión, la sugerencia y a las experiencias personales que todos tenemos de ella.