DE ESTRIDENTES SILENCIOS
DE DIOSES Y HOMBRES (Xavier Beauvois)
El silencio puede ser prueba de inteligencia, de acatamiento o incluso puede denotar una posible conmoción ante un hecho traumático. O también, como dijo Benedetti, el silencio puede ser ensordecedor. De Dioses y Hombres plasma de manera soberbia muchos de los matices de este mutismo intencionado, que de vez en cuando es tan necesario en nuestras vidas.
El film de Xavier Beauvois se basa en una historia real para contar la vida de un monasterio cisterciense situado en las montañas del Magreb, en el que viven ocho monjes franceses en perfecta armonía con la comunidad musulmana. Esta paz social y espiritual se verá interrumpida por un estallido de violencia religiosa contra todos los occidentales que viven en ese país.
De Dioses y Hombres se sumerge narrativamente en la cadente rutina y el ritmo diario de la comunidad religiosa retratada, articulándolo unas veces a través de planos contenidos, en fondo y forma, y otras, por medio de escenas calmadas. De esta manera, la estética de la cinta parece acoplarse naturalmente con la historia que cuenta, dando como resultado momentos casi místicos y de gran belleza como el de la cena regada con el Lago de los Cisnes.
Pero las cargas de profundidad que acompañan a la película no sólo son estéticas. El relato que dirige Beauvoix expone, cuestiona, pero no resuelve, temas como el fanatismo religioso y la labor de los estados ante este problema, el ecumenismo social, el trabajo de las comunidades católicas misioneras y la humanización de sus mártires, sus dudas, sus miedos.
Esta es una cinta completa y bien articulada, que viene precedida del Premio del Jurado en Cannes y de bastantes nominaciones en los César.
LA VOZ NUEVA DEL EMPERADOR
EL DISCURSO DEL REY (Tom Hooper)
Aquí el rey no está desnudo, le falta la voz. Aunque para ser más precisos el rey no es mudo, tiene problemas de dicción. Y esto es un inconveniente, ya que una de las tareas de los monarcas y sus allegados es pronunciar discursos y que estos, por lo menos, parezcan convincentes.
Colin Firth encarna la figura de este rey, Jorge VI, el padre de la actual reina de Inglaterra, que desde la niñez sufre problemas de tartamudeo. Para intentar solucionarlo ha consultado con un sin fin de especialistas y métodos, hasta que conoce a Lionel Logue, interpretado por Geoffrey Rush.
El Discurso del Rey suena a historia de autosuperación, a intento sobrio, eso sí, de humanización de las figuras que ostentan el poder, con unas excelentes interpretaciones de Colin Firth y Geoffrey Rush que, seguro, ganan mucho más en versión original. Pero la cinta, sin obviar que entretiene y que en muchas escenas divierte, se ve inundada de esa flema tan británica, tan correcta, que convierte un relato con potencial en algo prudente y algunos momentos simple. Tanto, que olvida dar más protagonismo al contexto histórico, los albores de la Segunda Guerra Mundial.
La película de Tom Hooper está de enhorabuena, los premios parecen caerle del cielo. Nominaciones a los Oscar, Bafta, Globos de Oro, incluso un Goya a la mejor película europea, poco merecido a tenor de sus competidoras, son los galones que este rey va acumulando en la solapa.
A. P. P.
Foto 1: http://de-diosesyhombres.blogspot.com
Foto 2: http://encinerados.blogspot.com/
No hay comentarios:
Publicar un comentario